Cómo me encanta el juego de las miradas, ese juego en el que sucede cuando en un momento de trabajo, de reunión con amig@s, etc, aparece esa persona a la que te sientes locamente atraíd@, te observa de reojo o guiñándote un ojo y sientes que por dentro tu sangre empieza a correr más rápido y tus mejillas se ponen de un color rojo y giras la cara intentando disimular para que nadie se de cuenta.
Cuánt@s habremos caído rendidos antes esos ojos que en un momento dado nos han mirado diciéndonos... "aquí y ahora te comía", y en tu interior piensas... "por favor llévame contigo y hazme tuya".
¡Oh si! Cuando esa persona a la que deseas, que te despierta tu libido, esa parte oscura que llevamos escondida y que te hace cometer locuras que nunca antes habías experimentado y empiezan los juegos de miradas seductoras, juegos de palabras en los momentos menos esperados, que te derriten y deseas que te posean en ese mismo instante.
Son situaciones en las que te sientes llen@ de vida, atractiv@, que te levantan el ánimo, el autoestima, con ganas de comerte el mundo porque te sientes desead@ por una persona y allí empieza el morbo.
Morbo: lo definiría como una serie de juegos que se crean entre dos personas que hacen que se sientan atraídas mutuamente, y que se genera cuando hay un feeling entre ambos.
¿Y a quién no le gusta el morbo? y a la vez sentir que entre los dos existe esa conexión, y ya no hablo de amor, de enamoramiento, no, eso es secundario, porque como experiencia propia, se puede tener feeling con una persona que te vuelve loca, porque juega contigo, como nunca antes te lo habían echo, y te dejas llevar, te haces sumisa porque te enloquece que te traten de esa manera, y entramos en el lado oscuro, aunque de vez en cuando intercambias ese papel y llevas tu las riendas...
Podríamos definirlo de muchas maneras, pero lo palabra que mejor describe a esta persona es "Amante" como bien significa "lo que nos apasiona", nos acompaña en los pensamientos y nos acostamos pensando en él, y cómo será vuestro próximo reencuentro.
Pero no deberíamos confundirlo con el amor cuando encuentras a ese amante, porque no conoces su otro lado, su día a día, sus preocupaciones, sus problemas... y sabes que no te hace falta, porque lo que os une es la pasión y la comunicación queda secundaria en esos momentos y aunque tan solo sean cinco minutos de los que se dispongan para estar juntos, se aprovechan al máximo, casi sin poder de decirte "Hola", aunque sientes que no hace falta porque lo deseas con todas tus ganas, y vas a por él, te empapas de ese momento, de cómo te hacer sentir, y todo lo demás es ajeno en ese encuentro.
Qué viv@s nos hacen sentir esos momentos, qué emocionante y excitante resulta pensar en aquellos encuentros, aquellos en los que no pensabas si lo que estabas haciendo estaba bien o si estaba mal, si era lo mejor para ti o si deberías seguir adelante y dejarlo en ese mismo momento, pero ¿y por qué no dejarnos llevar?
¡¡CARPE DIEM!! Creo que muchas veces deberíamos de dejar de cuestionarnos tanto las cosas cuando se nos presentan nuevas oportunidades y dejarnos llevar más por todo lo que nos gusta, porque hoy estamos bien, pero ¿y mañana? pienso que en esta vida deberíamos buscar nuevas emociones para que nuestro día a día no se convierta en una monotonía, y olvidarnos de lo que está bien o mal, disfrutemos de los frutos que se nos ofrecen y seamos más felices.
Aprendamos un nuevo significado de la palabra "Amante", no lo veamos como mal algo que está mal, como una palabra fea o que eso no es para nosotr@s porque nos verán una persona que se acuesta con el primero que pilla, todos tenemos nuestros secretos, así que demos la vuelta a ese significado y veámoslo como una oportunidad de nuestras vidas para sentir nuevas emociones, nuevas experiencias, morbo, pasión...
P.D. Y ¿ahora qué? ¿te animas a encontrar a ese amante y ver cómo sale el sol de nuevo en tus mañanas?...
Yo no podría resistirme... Aquí y ahora... me entregaba a ti
Una loca depravada